278.- Empezamos bien el año...

Esta tarde han atracado a un vecino mío dentro del portal, menuda forma de empezar el año. Hay gente que en vez de conseguir un trabajo se dedica a estos menesteres, y no debería ser así. Mi vecino es joyero y bajaba con su mujer y joyas en las bolsas, que él iba a vender, así que parece que la víctima de este atraco había sido seguida desde hace tiempo, ya que los atracadores esperaron a que saliera del ascensor para robarle las joyas, pero es que en vez de coger las joyas y largarse, la emprendieron a golpes con él y con su mujer, siendo los dos unas personas mayores. ¿Qué necesidad hay de pegarles? Con coger las joyas les habría bastado, pero no, tuvieron que dejar incosciente a mi vecino y dolorida a mi vecina. Ahora él está ingresado, y aunque ya se hayan limpiado las manchas de sangre del suelo, todavía he visto algunas en el espejo que seguro que nadie se había fijado en ellas.

Cada día es más difícil salir a la calle, o peor, es más difícil salir del portal, y tenemos unas leyes tan absurdas como dejarles poco tiempo encerrados. ¡Pues así no se reforman a los reclusos, en tan poco tiempo, que se les mete un día presos y a las dos semanas ya están fuera! Seré Cristiano, pero en una cosa estoy bien de acuerdo con el Islam, y es la de cortarle la mano al ladrón. ¡Seguro que muchos se lo pensarían mejor antes de robar! ¡Necesitamos leyes más severas, porque a muchos delincuentes les compensa cometer el delito y permanecer en la cárcel, que para el tiempo que va a pasar y para el botín que habrá ganado le compensa a trabajar el mismo tiempo que estuvo encerrado!

Espero que mis vecinos se recuperen y que las autoridades atrapen (si no lo han hecho ya, porque tampoco estoy muy informado) a los atracadores.